En Almafiel creemos que una nutrición adecuada puede cambiarlo todo: el pelaje, la vitalidad, la digestión… incluso la forma en que un animal habita su cuerpo y su mundo. Por eso, entre tantas corrientes nutricionales, la filosofía BARF ha sido una de nuestras principales fuentes de inspiración.
BARF significa Biologically Appropriate Raw Food (Alimentación Cruda Biológicamente Apropiada). No se trata solo de dar alimentos crudos: se trata de respetar la naturaleza carnívora del perro y el gato, y de ofrecer una nutrición lo más parecida posible a la que tendrían en un entorno silvestre, con alimentos frescos, sin ultraprocesar y con el menor grado de intervención humana.
¿Por qué nos inspira la filosofía BARF?
Ahora bien, no todos los tutores pueden (ni quieren) aplicar la dieta BARF completa. Ya sea por estilo de vida, por cuestiones logísticas o por la edad o condición del animal, entendemos que cada hogar tiene su realidad. Por eso, en Almafiel buscamos acercar lo mejor de esa filosofía a todos los animales, sin extremismos y con mucha responsabilidad.
No todos nuestros productos son alimentos crudos en sí mismos, pero están pensados para sumar calidad nutricional real a cualquier tipo de dieta: desde un pienso de buena calidad hasta una dieta casera o mixta. Suplementamos donde hay huecos, reforzamos lo esencial, y lo hacemos con respeto y transparencia.
Porque si algo nos inspira del enfoque BARF es su búsqueda de coherencia: darles a los animales lo que su cuerpo realmente necesita, sin disfraces, sin marketing vacío, sin atajos. Nutrir con intención, con criterio y con amor. Ese es nuestro norte. Y en ese camino, la filosofía BARF ha sido una guía poderosa.